Hearthstone

Charla en la taberna: NoHandsGamer

Charla en la taberna: NoHandsGamer

¡Acercaos todos y escuchad, pues es la hora de la Charla en la taberna, la serie en la que conocemos a algunos de los increíbles miembros de nuestra gran comunidad!

Luke «NoHandsGamer» Kooken es un talentoso Grandmaster de América conocido por jugar a Hearthstone sin usar las manos. Hoy hablaremos sobre lo importante que es estar mentalizado a la hora convivir con esa discapacidad y para prosperar en los niveles superiores de la competición. ¡Agarrad una silla y acercaos, porque es la hora de la Charla en la taberna!

Esta entrevista ha sido editada para facilitar su lectura.

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P: Háblanos de ti y de cómo te adentraste en el mundo de Hearthstone.

R: Tengo una discapacidad por dolor crónico que empezó sobre 2009. En 2016, el dolor se agravó significativamente. Empecé a tener problemas con los controles de otros juegos, así que mi hermano me enseñó Hearthstone. Tengo experiencia en juegos de cartas y la interfaz era fácil de manejar con mis dispositivos de ayuda para discapacitados. A medida que mejoraba, empecé a subir puestos en la jerarquía y a competir en torneos de Battlefy. En el momento en que empecé a jugar bien, me sugirieron que retransmitiera por internet. Así fue como empezó todo.

P: ¿Hearthstone era compatible con dispositivos que ya tenías en aquel entonces?

R: Sí, antes de convertirme en profesional de Hearthstone, estuve 10 años trabajando en una aseguradora. No podía trabajar sin las manos, así que fui a los asesores de discapacidad de mi universidad y entre otras cosas me recomendaron un programa de voz a texto.

También tenía una cámara infrarroja. Los que me ven jugar seguro que ya la han visto, porque no uso el programa de voz a texto en Hearthstone. La cámara mide la luz que se refleja en una pegatina que tengo en las gafas, y esto me permite realizar movimientos con la cabeza para controlar el ratón.

P: ¿Cómo adaptaste tus dispositivos a Hearthstone?

R: Tuve que hacer ciertos ajustes. Ahora tengo un pedal que no tenía en mis primeros años con Hearthstone, porque me dolía de usarlo todo el día. Antes utilizaba pulsaciones al posar el cursor, es decir, mantenía el ratón en un punto para que registrara un clic. Eso me daba problemas en turnos en los que tenía que realizar muchas acciones. La cosa empeoraba en partidas de mucha presión, porque el cuerpo está repleto de adrenalina y cuesta mucho mantener el cursor el tiempo suficiente para que se registre el clic.

El pedal aumenta mis APM (acciones por minuto) un 200 %. Si me veis jugar, observaréis que hago mis jugadas muy rápido. Calculo que soy más rápido que un 80 % de jugadores de Hearthstone porque tomo las decisiones mucho más rápido, y la mayor parte de las APM son decisiones. Seguro que habéis visto a mucha gente sin problemas en las manos que esperan al final del turno, que cometen errores y que se quedan sin tiempo. Nos pasa a todos. Sin embargo, que yo tenga una desventaja física me ha hecho más consciente de ello. No me gusta esperar al final de mi turno para empezar a realizar acciones, porque sé que quizá no me dará tiempo. Muchas veces, cuando me veis esperando al final del turno intencionadamente, es porque ya he tomado todas las decisiones de ese turno y ya estoy pensando en una gran jugada para más tarde.

P: Has mencionado que las cosas están yendo a mejor últimamente, ¿verdad?

R: En torno a 2017-2018 empecé a aclarar mis ideas. Por aquel entonces hacía mucho yoga, porque era una de las actividades físicas que sí podía hacer. Soy una persona muy enérgica; cuando encontré algo que podía hacer sin que el dolor me lo impidiera, me obsesioné. Iba a clases de yoga y luego volvía a casa y hacía más yoga. Pero me pasé y un día empezó a dolerme muchísimo la espalda.

Logré controlarlo, pero una semana antes del Hearthstone Championship Tour: Filadelfia, me empezó a doler la espalda hasta el punto de ser extenuante. Fui al quiropráctico y le pregunté por qué me dolía la espalda jugando a Hearthstone, pero no en el trabajo. Me dijo que quizá solo era presión. Para mí, Hearthstone es muy importante. Implica turnos estresantes, y en un momento dado puede haber mucho en juego, a nivel físico y emocional, sobre todo en un torneo.

Me tomé un descanso durante el resto de la semana, envié mazos con los que me sentía cómodo ¡y acabé ganando! Fue el primer torneo importante que gané y donde mucha gente empezó a conocerme.

Una semana más tarde, el dolor de espalda regresó. Fue desalentador y frustrante, porque sentía que estaba haciendo algo bien. Y de repente, el dolor vuelve y me detiene. Me daba miedo pensar en que tenía que dejar Hearthstone y quizá mi trabajo. Sentí que era la gota que colmaba el vaso; que el dolor había empeorado tanto que ya no podría evitarlo.

Empecé a investigar y descubrí un libro llamado Libérese del dolor de espalda. La idea fundamental del libro es que no te pasa nada en la espalda; es solo que tienes mucho estrés y tu cuerpo reacciona a ese estrés produciendo dolor de espalda. No puedo hablar en nombre de la gente que tiene problemas en la espalda, pero me sentí identificado porque fui a muchos médicos y todos me decían que no encontraban ningún problema físico.

Así que hice un tratamiento para la espalda con cosas como terapia, escribir un diario, reflexionar sobre mí, y en cosa de dos meses, ¡desapareció el dolor de espalda! Fue un milagro. Con el tiempo, dejé de sentir dolor en las manos y los pies, y ahora puedo escribir con moderación, usar el pedal y realizar otras actividades que antes no podía hacer.

Hay un concepto denominado «la regla del 80/20», por la que se consiguen el 80 % de los beneficios realizando el 20 % de la actividad. Escribir con moderación ha mejorado mucho mi calidad de vida. Usar las manos de vez en cuando me permite hacer cosas en Twitch y YouTube. Al principio me costaba mucho. Por ejemplo, cuando retransmitía y alguien me preguntaba una cosa sencilla, me dolía solo por escribir «!deck» para responder. La productividad añadida que he conseguido al crear contenido, aunque no sea máxima, ha sido muy útil para llevar mi propio negocio.

P: ¿Cómo te ha cambiado a la hora de planear estrategias?

R: Algo muy común entre jugadores de Hearthstone es que primero se nos da bien, luego nos encontramos con un obstáculo y acabamos pensando: «¡Ah! ¡Hearthstone se me da fatal!». Pero me digo a mí mismo: «todos tenemos altibajos jugando a Hearthstone y el metajuego cambia constantemente. Todos tenemos estas dificultades». Saber que me he esforzado y que estoy centrado me ayuda a calmar mi ansiedad y a sentirme más seguro de mí mismo.

Se trata de hacer todo lo que esté en tu mano. Luego hay que seguir adelante y dejar que todo caiga en su lugar, y si no sale como tú quieres, ya lo conseguirás la próxima vez, o la siguiente. Si llevas las riendas de tus habilidades, te esfuerzas, te adaptas y mantienes las buenas costumbres, al final todo acabará saliendo bien. Es difícil conseguir esa constancia, pero si lo haces, con el tiempo al final las cosas irán bien.

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P: Al principio de tu carrera como Grandmaster tenías dudas sobre competir a ese nivel. En las últimas temporadas te has convertido en uno de los mejores Grandmasters de América. ¿Te ayudó a llegar ahí ese cambio de mentalidad?

R: Sí. En parte, fui duro conmigo mismo porque sabía que no estaba a la altura de mis propios estándares. He tenido momentos en la vida en los que sabía que necesitaba descansar, pero no lo hice. Por eso estuve sufriendo durante un año. Ahora soy muy consciente de mis errores.

Cuando publiqué esas declaraciones, no quería que la gente pensara que solo había tenido mala suerte. Después de esa temporada recibí palabras de ánimo, pero sabía que si seguía con esos mismos hábitos, no acabaría sobreviviendo a menos que tuviera suerte. Es bonito decir «sé que lo harás genial», pero juego sometido a mucha presión contra 15 jugadores de alto nivel que se esfuerzan al máximo. No hay garantías. Es un juego de suma cero: habrá quienes ganarán y otros que acabarán eliminados de esta actividad que hacemos a nivel profesional.

En la pasada temporada sabía que no había cometido los mismos errores. Cambié muchos hábitos: pasé menos tiempo retransmitiendo y me centré en dominar mis mazos. Programé mis tiempos de consumo de cafeína antes de las partidas y empecé a hacer ejercicios de respiración y otros hábitos para que mi cerebro se relajara. De esta forma, aunque no ganara, sabía que había hecho todo lo que estaba en mi mano para ganar. Me sentí orgulloso de mi rendimiento y me alegré de recibir ese apoyo, porque sentí que lo merecía.

P: ¿Qué método sigues como entrenador y qué pueden hacer los jugadores para mejorar?

R: Cuando entreno a gente, observo sus jugadas y suelo encontrar un patrón de errores. No solemos fijarnos en nuestros propios errores; de ser conscientes de ellos, los corregiríamos. Si no puedes permitirte un entrenador, puedes repasar las repeticiones o pedirle a un amigo que observe tus jugadas. A veces se detectan cosas de esta manera.

Aprender tiene dos objetivos: descubrir ideas nuevas que incorporar a tus jugadas y dominar lo que ya sabes. Yo también entreno de la misma manera. Enseño cosas nuevas y después repasamos las cosas que aprendimos la semana anterior.

Cuantas más cosas se trabajen y se dominen a nivel consciente, más energía mental tendrás para aprender y ejecutar cosas más avanzadas. Hay quienes piensan que para aprender técnicas avanzadas hace falta una gran capacidad cognitiva, pero a veces, con solo dominar lo que sabes y prestar atención, el cerebro hace cosas que no lograba hacer antes. Bajo presión, cuanto más tengas dominado, más confianza tendrás en tus jugadas y más oportunidades encontrarás para tomar decisiones menos frecuentes.

P: ¿Qué dirías para hacer que la comunidad sea más acogedora para discapacitados?

R: Es una pregunta rara, porque he sido muy bien recibido en Hearthstone, tanto por Blizzard como por la gente de la comunidad. No puedo hablar en nombre de todos, porque cada discapacitado tiene sus propias necesidades, pero en mi caso siempre tengo el miedo de ir a un evento y que me obliguen a usar sus dispositivos de ayuda en lugar de los míos propios. Ahora que me conocen en la comunidad, confío en que eso no sucederá. Esas son las cosas que me dan miedo en la vida.

Puedo encargarme de mis propios problemas. Solo necesito que los demás sean empáticos y se adapten. Creo que quienes ya no están en la fase inicial de la discapacidad, ya han descubierto cómo moverse y cómo vivir su vida. Han pasado por esa etapa, y yo también. Cuando me dicen «¿Y no puedes...?», les respondo: «No, no puedo».

Como he dicho antes, ¡la gente se ha ajustado a mí con Hearthstone y estoy muy agradecido!

Descubrid más sobre NoHandsGamer en Twitch, YouTube y en la temporada 2 de Hearthstone Grandmasters, ¡a partir del 13 de agosto! También podéis seguirlo en Twitter para estar al día y para contratarlo como entrenador.

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