Próxima actualización de equilibrio de febrero de 2019

Vamos a cambiar las siguientes cartas en una actualización que lanzaremos el 5 de febrero.

Normalmente, cuando hablamos de los ajustes previstos para las cartas de Hearthstone, comentamos cada carta por separado para explicar por qué creemos que es necesario el cambio.

Esta vez vamos a hacer las cosas de un modo diferente, porque la mayoría de los cambios obedecen a un mismo motivo. Seguid leyendo para saber por qué vamos a modificar estas cartas y cuál es nuestra filosofía con esta actualización.

Creemos que Hearthstone es más divertido cuando las estrategias están en constante evolución. Cada vez que lanzamos nuevas cartas, esperamos que los mazos de expansiones anteriores se actualicen con algunas de ellas, además de que inventéis y probéis arquetipos de mazos totalmente nuevos. Uno de los aspectos que entorpecen ese objetivo es la existencia de cartas básicas y clásicas tan efectivas que, con independencia de la competencia, determinan los estilos de mazos que se consideran viables expansión tras expansión y año tras año.

Lo ideal sería que los conjuntos básico y clásico representaran la esencia y las mecánicas de cada clase. Como ya hemos mencionado antes, las cartas de estos conjuntos pueden volverse problemáticas cuando provocan que el resto de estrategias pierda interés. No obstante, esto no implica que todas las cartas básicas y clásicas deban ser poco efectivas. De hecho, consideramos importante que estos conjuntos contengan un buen número de herramientas útiles para diferentes situaciones o arquetipos de mazos.

Vamos a cambiar estas cartas concretas porque todas ellas han predominado bastante sin importar qué estrategias eran populares o qué otras cartas existían en cada momento. Cuando existen cartas como estas, pueden hacer que los jugadores pierdan parte de la flexibilidad con la que cuentan a la hora de crear mazos, lo que conlleva en definitiva más rigidez en la diversidad de mazos que vemos en Hearthstone.

El objetivo de estos retoques es hacer que estas cartas menos atractivas y dejen de ser herramientas polivalentes de «inclusión obligatoria», para convertirlas en alternativas más probables para los mazos centrados en las características que ofrecen.

Sangre fría: ahora cuesta 2 p. de maná (en lugar de 1)

Tótem Lengua de Fuego: ahora cuesta 3 p. de maná (en lugar de 2)

Igualdad: ahora cuesta 4 p. de maná (en lugar de 2)

Marca del cazador: ahora cuesta 2 p. de maná (en lugar de 1)

Esmeralda mágica: ahora cuesta 6 p. de maná (en lugar de 5)

Esta es la única carta de esta ronda de cambios que no es básica ni clásica. El aumento del coste en 1 punto reduce su utilidad como herramienta agresiva de tempo al principio de la partida. En su lugar, queremos situar a Esmeralda mágica como amenaza eficiente para mitad y final de la partida. Ahora mismo, el rendimiento y la popularidad del cazador son muy elevados. Con esta modificación —junto al cambio de Marca del cazador—, buscamos hacer frente a su preponderancia sin convertirlo en una opción inviable.

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Tenemos ganas de ver cómo se desarrolla el metajuego en los próximos meses. Gracias por leer este artículo y buena suerte en la jerarquía.

Cuando se hagan efectivos los cambios, los jugadores podrán desencantar las cartas no básicas afectadas por su valor completo de polvo Arcano durante dos semanas.

Tótem Lengua de Fuego y Marca del cazador son cartas básicas y no se pueden desencantar.