Para celebrar Halloween, nuestros expertos han escudriñado cada ciénaga, cada cueva, cada grieta, cada mazmorra y cada campo para ofreceros algunos de los lugares más aterradores y extraños que se pueden encontrar en Azeroth. Si lo vuestro son los sustos y la curiosidad, habéis venido al lugar adecuado.

Claros de Tirisfal

A nadie sorprenderá saber que el territorio original de los Renegados alberga algunos de los lugares más aterradores y extraños de Azeroth.

Anillo de champiñones: Una melodía encantada

Al oeste del Camposanto, en el Bosque Susurrante, un anillo de fantasmagóricos champiñones blancos espera... algo. Si tenéis paciencia, seréis testigos de cómo un grupo de dragones feéricos aparece lentamente a su alrededor para realizar un ritual musical, una melodía encantada que permanecerá en vuestra cabeza incluso mucho después de haberos ido, sobre todo si despojáis el rollo de música del dragón feérico y lo añadís a la gramola de vuestra ciudadela.

Sala del Trono de Lordaeron: La sangre de un rey

Probablemente una de las ubicaciones encantadas más conocidas sea la Sala del Trono en las Ruinas de Lordaeron, sobre Entrañas. Al caminar por el pasillo que conduce al área, grabada de forma indeleble en las losas a vuestros pies percibiréis los indicios de la recepción festiva que esperaba al hijo predilecto, Arthas Menethil, a su regreso a casa. Las manchas de pétalos aplastados atestiguan la pompa y ceremonia del evento.

Cuando entréis en la Sala del Trono, percibiréis en el suelo restos de la sangre del rey Terenas Menethil, que tienen su origen en aquel emotivo momento en el que su hijo, Arthas, le abrazó por última vez... con acero. Si prestáis atención, oiréis los ecos del tiempo susurrando los acontecimientos de aquel fatídico día.

«¡Este reino caerá, y de las cenizas surgirá un nuevo orden que sacudirá los cimientos del mundo!»

Si valoráis vuestra salud mental, os sugerimos que no os detengáis en las voces demasiado tiempo. Consiguen filtrarse hasta lo más profundo de vuestra alma.

Paso de la Muerte

El corazón delator de la criptas de Karazhan

Los vientos del Paso de la Muerte nunca cesan y son portadores de crujidos, chillidos, aullidos y todo tipo de emanaciones auditivas que ponen los pelos de punta. Quizás ya conozcáis los horrores que se ocultan en las salas de Karazhan, pero puede que aún tengáis que adentraros en su cripta.

La encontraréis en la Parcela de Morgan, detrás de Karazhan. Al entrar, oiréis el débil sonido de un latido. No podréis avanzar demasiado, y quizás eso sea bueno, pero vuestra imaginación y ese pumpún, pumpún incesante puede que os lleven al borde de la locura si permanecéis demasiado tiempo en su interior.

Bosque de Elwynn

El Bosque de Elwynn ha sido testigo de numerosos eventos históricos, y aunque, en apariencia, parece un lugar ideal para formar una familia, tiene una buena dosis de secretos.

Peluquería de Ventormenta: Un afeitado apurado

En el Distrito de Mercaderes, los clientes de la peluquería vienen y van sin mirar dos veces, salvo en el espejo, ni tomarse un instante para pensar en el jovial Jelinek Tijeras. Pero preguntaos, ¿alguna vez habéis mirado más allá de lo que oculta la afable y amistosa fachada del establecimiento? ¿Os habéis atrevido a cruzar las escaleras de la parte trasera? Un breve paseo por la segunda planta hará que os lo planteéis... todo. Y un vistazo al dormitorio trasero hará que os preguntéis si la cuchilla abierta de la mesa tiene algo que ver con los restos que hay bajo la tarima.

Posada de Villadorada: Juego de niños

Las siete de la mañana parece una hora razonable para que los niños de Villadorada se levanten, pero algo raro ocurre con seis de ellos. Todas las mañanas se desplazan entre Ventormenta y un edificio en Villadorada de forma extraña, siguiendo un padrón indescifrable, como dirigidos por una fuerza invisible. Todo parece en orden, y la instructora de desuello Helene Desollapelambres y la peletera Adele Fielder, en la planta baja, no parecen en absoluto preocupadas. Pero en el piso de arriba, la sensación de hogar se vuelve oscura y las cosas adquieren un tono algo más lúgubre. Pasar más tiempo con estos niños puede sacar a cualquiera de sus casillas. Aquellos que han observado su comportamiento en la casa hablan de ruidos extraños, gritos, e incluso la voz del mismísimo dios oscuro C’thun.

Las Tierras Devastadas

Misterioso ritual de la montura

En lo alto de esta tierra fragmentada, los extraños y misteriosos restos de lo que ha podido ser un ritual permanecen intactos y a salvo de la destrucción propiciada por las luchas que se suceden bajo los mismos. Cuatro esqueletos aparecen sentados con jarras en la mano y un pilar encadenado entre ellos; las cadenas están adornadas con pequeñas cabezas de dragón de metal esculpido. Bajo ellos, un cuenco lleno de un brillo dorado se arremolina. No hay rastro de nada que indique si el ritual se completó o fue la causa de sus muertes.

Estos son solo algunos de los lugares que os podréis encontrar por todo Azeroth. Solo los más curiosos y osados realizarán el viaje, y estamos seguros de que merecerá la pena. Si tenéis una ubicación preferida que os pone los pelos de punta, compartidla abajo con vuestros compañeros buscadores de emociones.